Ningún plan sobrevive al primer contacto con el enemigo
(dicho militar)
PRIMER CONTACTO (y segundo, y tercero…)
El parto, pese a los nervios, transcurre sin problemas. Pequeños detalles, como que el enano decide tomar impulso apoyándose en el diafragma de su mami con los pies, lo que hace inútiles todos los ejercicios respiratorios que llevábamos ensayados. O la matrona, cuyos brazos son como una pierna y media mía. Más que asistir a un parto parece que vaya a lanzar peso (casi me parece oir cuando entra un altavoz: y representando a Ucrania ¡Ludmila Petroskaia!). Pero conoce su trabajo: a las tres horas de llegar al hospital el enano está fuera (¡Ludmila lo ha vuelto a conseguir, señores! ¡Qué gran lanzamiento!)
Turno de visitas. Por suerte hemos olvidado decir dónde íbamos a amigos, compañeros de trabajo… la familia pase, pero esto no es Santiago ni hacen falta peregrinajes. Eso sí, no nos libramos de las llamadas, todas tan originales… ¿y a quien se parece? ¿A ti? ¿A ella? ¿A su madre? ¿A tu tío abuelo segundo Jeremías?… ¡Y yo que sé, joder! Es un recien nacido, es bajito, pelon, arrugado… pues a Winston Churchill, digo yo.
Nueva metamorfosis de mi diosa: deja de ser Afrodita, señora del deseo, y se convierte en Démeter, madre nutricia. La teta es un kit multiusos, vale para tantas cosas… enano afortunado.
Llegada al hogar: en el curso nos explicaron que era normal que el bebé se tirara durmiendo los primeros días, incluso las primeras semanas, que no nos preocupáramos. Pensamos, mira que bien, así te mimo y te repones un poco mientras el lironcillo ronca. Sólo que alguien ha debido equivocarse en la sala de bebés y en vez de un lironcillo nos han dado un pequeño buho, todo el puñetero día con los ojos bien abiertos.
Primera noche en casita. Al llegar la noche cae redondo según se toma su cenita: menú del día, teta derecha. Se queda un ratito colgado y frito con el churrup churrup, suave plop al despegarlo y al nidito. Por fin un poco de paz: un ratito abrazados y a dormir nosotros también…
…¡DIOS SANTO, LA LUFTWAFFE ESTÁ BOMBARDEÁNDONOS, CORRE, HAY QUE LLEGAR AL REFUGIO DE TRAFALGAR SQUARE… ah, no, no es una sirena antiaérea, es Winston Churchill que quiere su tentempié de las tres de la mañana ¿Cómo es posible que algo tan diminuto suelte un berrido de ese volumen?.
Primera semana, paseo con carrito: bien despierto durante tooooooodo el camino y el muy jodío espera a dormirse en el preciso instante en el que abrimos el portal. Por supuesto se despierta con el ascensor.
Tercera semana. Venga cariño, vete ya, ya me me encargo yo de todo, necesitas salir… total, un par de horas a solas con el peque ¿que puede pasar?…
…Por ejemplo que se eche a llorar según sale su madre por la puerta y sólo se calme en brazos y paseando? Bueno, total sólo pesa cuatro kilos… Tres horas después ya sé que cuatro kilos revolviéndose en brazos no son lo mejor para la espalda. Y como no, según entra mami por la puerta deja de llorar y la gorjea. Confiesa la verdad peque: no me has perdonado lo de los meneos ¿verdad?
Tras tres meses acumulo varias dudas existenciales sobre la crianza de niños.
– Sé que pillar teta es un gozo, a mí me lo vas a contar, pero ¿es realmente necesaria poner esa expresión caníbal en cuanto mami se levanta la camiseta?
– ¿Cuanto puede comer un niño tan enano? Se agarra a una teta talla 110 y cuando se despega apenas es una 85. Y como la otra sigue rebosante mi reina se vence a babor.
– ¿Cuanto puede cagar un niño al día? ¿Hay alguna empresa que se dedique al reciclado de cacas infantiles? Podría ser una solución al problema de la escasez de materia orgánica en nuestro suelo.
– ¿Cómo logra cagar y mear todo a la vez y acompañado de abundantes efectos sonoros justo en el preciso instante en el que le acabo de cerrar el pañal nuevo? A mí me costaría mantener mi intestino tan afinado. Y qué puntería a la hora de hacer pis: el puñetero no falla a la hora de darme en la cara. Al menos he logrado esquivar las andanadas de metralla, ahí se le nota la cara de esfuerzo y puedes apartarte del área de tiro.
– ¿Quién fue el hijodelagranputa que dijo que los bebés se relajan en la mecedora? Por comparación la homeopatía parecería eficaz.
FInales del tercer mes: primeras experiencias alimentarias sin mami, que dentro de nada vuelve al curro. Estrenamos el sacaleches (vaya nombrecito) me armo de biberón, acomodo al enano y al primer descuido se lo calzo en la boca. Tras unos segundos de indignada sorpresa empieza a comer, pero me mira de reojo con cara de que sepas que por que eres tú y casi me caes bien, pero que conste que esto no es lo mismo. A mí me lo vas a contar, que no pillo cacho desde hace…
Esta tarde el nene ha tenido un descuido (¡se ha dormido! ¡yupiiiiii!) e iniciamos los primeros escarceos tras la cuarentena. Mucho cuidado, despacito y buena letra…
– Señores fabricantes de productos farmacéuticos. Muy señores míos: ¿quién decidió que los lubricantes vaginales necesitaban aromas de fruta? ¿Y desde cuándo se considera que el sabor sugus de piña es un aroma frutal? ¿Porqué un coño tendría que saber a sugus de piña? No tengo nada en contra de los sugus de piña, pero me gusta que los coños sepan a coño, es más, lo exijo ¡vayanse ustedes a la mierda!
(dicho militar)
PRIMER CONTACTO (y segundo, y tercero…)
El parto, pese a los nervios, transcurre sin problemas. Pequeños detalles, como que el enano decide tomar impulso apoyándose en el diafragma de su mami con los pies, lo que hace inútiles todos los ejercicios respiratorios que llevábamos ensayados. O la matrona, cuyos brazos son como una pierna y media mía. Más que asistir a un parto parece que vaya a lanzar peso (casi me parece oir cuando entra un altavoz: y representando a Ucrania ¡Ludmila Petroskaia!). Pero conoce su trabajo: a las tres horas de llegar al hospital el enano está fuera (¡Ludmila lo ha vuelto a conseguir, señores! ¡Qué gran lanzamiento!)
Turno de visitas. Por suerte hemos olvidado decir dónde íbamos a amigos, compañeros de trabajo… la familia pase, pero esto no es Santiago ni hacen falta peregrinajes. Eso sí, no nos libramos de las llamadas, todas tan originales… ¿y a quien se parece? ¿A ti? ¿A ella? ¿A su madre? ¿A tu tío abuelo segundo Jeremías?… ¡Y yo que sé, joder! Es un recien nacido, es bajito, pelon, arrugado… pues a Winston Churchill, digo yo.
Nueva metamorfosis de mi diosa: deja de ser Afrodita, señora del deseo, y se convierte en Démeter, madre nutricia. La teta es un kit multiusos, vale para tantas cosas… enano afortunado.
Llegada al hogar: en el curso nos explicaron que era normal que el bebé se tirara durmiendo los primeros días, incluso las primeras semanas, que no nos preocupáramos. Pensamos, mira que bien, así te mimo y te repones un poco mientras el lironcillo ronca. Sólo que alguien ha debido equivocarse en la sala de bebés y en vez de un lironcillo nos han dado un pequeño buho, todo el puñetero día con los ojos bien abiertos.
Primera noche en casita. Al llegar la noche cae redondo según se toma su cenita: menú del día, teta derecha. Se queda un ratito colgado y frito con el churrup churrup, suave plop al despegarlo y al nidito. Por fin un poco de paz: un ratito abrazados y a dormir nosotros también…
…¡DIOS SANTO, LA LUFTWAFFE ESTÁ BOMBARDEÁNDONOS, CORRE, HAY QUE LLEGAR AL REFUGIO DE TRAFALGAR SQUARE… ah, no, no es una sirena antiaérea, es Winston Churchill que quiere su tentempié de las tres de la mañana ¿Cómo es posible que algo tan diminuto suelte un berrido de ese volumen?.
Primera semana, paseo con carrito: bien despierto durante tooooooodo el camino y el muy jodío espera a dormirse en el preciso instante en el que abrimos el portal. Por supuesto se despierta con el ascensor.
Tercera semana. Venga cariño, vete ya, ya me me encargo yo de todo, necesitas salir… total, un par de horas a solas con el peque ¿que puede pasar?…
…Por ejemplo que se eche a llorar según sale su madre por la puerta y sólo se calme en brazos y paseando? Bueno, total sólo pesa cuatro kilos… Tres horas después ya sé que cuatro kilos revolviéndose en brazos no son lo mejor para la espalda. Y como no, según entra mami por la puerta deja de llorar y la gorjea. Confiesa la verdad peque: no me has perdonado lo de los meneos ¿verdad?
Tras tres meses acumulo varias dudas existenciales sobre la crianza de niños.
– Sé que pillar teta es un gozo, a mí me lo vas a contar, pero ¿es realmente necesaria poner esa expresión caníbal en cuanto mami se levanta la camiseta?
– ¿Cuanto puede comer un niño tan enano? Se agarra a una teta talla 110 y cuando se despega apenas es una 85. Y como la otra sigue rebosante mi reina se vence a babor.
– ¿Cuanto puede cagar un niño al día? ¿Hay alguna empresa que se dedique al reciclado de cacas infantiles? Podría ser una solución al problema de la escasez de materia orgánica en nuestro suelo.
– ¿Cómo logra cagar y mear todo a la vez y acompañado de abundantes efectos sonoros justo en el preciso instante en el que le acabo de cerrar el pañal nuevo? A mí me costaría mantener mi intestino tan afinado. Y qué puntería a la hora de hacer pis: el puñetero no falla a la hora de darme en la cara. Al menos he logrado esquivar las andanadas de metralla, ahí se le nota la cara de esfuerzo y puedes apartarte del área de tiro.
– ¿Quién fue el hijodelagranputa que dijo que los bebés se relajan en la mecedora? Por comparación la homeopatía parecería eficaz.
FInales del tercer mes: primeras experiencias alimentarias sin mami, que dentro de nada vuelve al curro. Estrenamos el sacaleches (vaya nombrecito) me armo de biberón, acomodo al enano y al primer descuido se lo calzo en la boca. Tras unos segundos de indignada sorpresa empieza a comer, pero me mira de reojo con cara de que sepas que por que eres tú y casi me caes bien, pero que conste que esto no es lo mismo. A mí me lo vas a contar, que no pillo cacho desde hace…
Esta tarde el nene ha tenido un descuido (¡se ha dormido! ¡yupiiiiii!) e iniciamos los primeros escarceos tras la cuarentena. Mucho cuidado, despacito y buena letra…
– Señores fabricantes de productos farmacéuticos. Muy señores míos: ¿quién decidió que los lubricantes vaginales necesitaban aromas de fruta? ¿Y desde cuándo se considera que el sabor sugus de piña es un aroma frutal? ¿Porqué un coño tendría que saber a sugus de piña? No tengo nada en contra de los sugus de piña, pero me gusta que los coños sepan a coño, es más, lo exijo ¡vayanse ustedes a la mierda!
Sin otro particular, se despide su seguro servidor y ex-usuario. Atentamente, etc, etc…
– Querido señor Sugus. Le escribo con una propuesta para una nueva y audaz línea de sabores orientada al consumidor varón de entre treinta y cuarenta años, un target que hasta ahora ha sido muy descuidado por el mercado de las chuches…
– Querido señor Sugus. Le escribo con una propuesta para una nueva y audaz línea de sabores orientada al consumidor varón de entre treinta y cuarenta años, un target que hasta ahora ha sido muy descuidado por el mercado de las chuches…
¿lubricantes vaginales con sabor a sugus de piña?? que cosas....
ResponderEliminarOhh..aqui quería yo llegar. Cómo has obviado ese bonito momento paternal, cuando tras coger al niño llorando..unos..pongamos 2 minutos y medio..el padre se gira y dice: " yo creo que lo que le pasa es que tiene hambre".....
y tú henchida de amor le dices...¿ hambre, hambre???...si ha comido hace 20 minutos!!!!.....
Es curioso como cuando luego se pasa al biberón que pueden dar los dos, el niños ya no tiene hambre..lo que pasa a tener es " mamitis".
en fin....
Ya se sabe, el concepto "aromas frutales" es tan amplio… Pero vamos, comparado con los condones de sabores casi parece razonable.
ResponderEliminarPues mira, eso no lo vivimos: el peque se vaciaba su teta y se quedaba cual garrapatilla hinchada, y en general traspuesto para un buen ratito (los descuidos mencionados). Y los lloros, pues por riguroso turno que para eso curraba en casa (tenía un contrato con el Min. de Defensa pero decidí dejarlo cuando nos quedmaos embarazados)
Y sí, el paso al biberón es darle a entender que la vida no es una fiesta. Y menos mal que no hubo problemas de dolores, grietas… porque mi prima I, que parió le mismo día (nos llamamos de hospital a hospital) descubrió a las tres semanas que a su enano le había salido un diente prematuro. Y para su desgracia no lo vio a tiempo
Pipas, Lubricantes vaginales saborizados, Sugus...me está tentando ir directamente a hacer un comentario crítica gastronómica.
ResponderEliminarLos tres primeros meses son los para mi los meses "¿qué le pasa ahora al niño?. Y yo qué sé". Ah, y una cosa grandiosa, como les huele la cabeza, a bizcocho, eso me encanta.
(No tengo ni idea de lo que es la FSM, pero me gusta vivir con esa ignorancia).
Un saludo.
¡Blasfema! ¡Hereje!. El FSM es el Flying Spaguetti Monster, el único dios verdadero.
ResponderEliminarhttp://es.wikipedia.org/wiki/Pastafarismo
Como penitencia deberás tomarte una buena boloñesa durante la próxima semana.
Y pensar que a Ronald Hubard sí lo tomaron en serio...
ResponderEliminarEsto demuestra que soy muy iñorante, amazing grace, how sweet the bolognese?. Mira que me sé por qué va lo de so long and thanks for all the fish, que ya es saber, pero esto, ah, no sabía yo de mis herejías. Cumpliremos la penitencia. Y definitivamente los comentarios se hacen gastronómico teológicos.
ResponderEliminar¿Te gusta la Ciencia Ficción? Entonces estás casi perdonada. Delitate con la boloñesa y entra en SU gracia
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