jueves, 20 de noviembre de 2014

COSAS QUE SÉ DE TI


(Esperaba escribirlo hace dos semanas, pero al final se me echó el tiempo encima y no me salía. Hoy me ha salido por fin, así que, con retraso, feliz cumpleaños) 

Sé que de pequeña eras un trasto. Si tus hermanos eran Zipi y Zape, tú eras una digna compañera. Y siempre que lo pienso, pienso en como nos llevaste de derechitos a los cinco ¿será que cuando hacíamos una trastada, tú ya ibas por delante?

Sé que has trabajado sin cesar por nosotros, del día a la noche, y buena parte de las noches, durante veinte, treinta cuarenta años... y nunca podremos pagarte ese trabajo.

Sé que de ti saqué mucho de lo que soy, como mi ansia de leer, o mi mano para dibujar...

... o mi cabezonería, porque mira que eres cabezona, como buena maña.

Y sé que tienes esa nobleza que no dan el dinero, los apellidos ni los títulos. Se tiene o no se tiene, y tú la tienes. Cuando te hicieron dama de Santiago no te hicieron un honor, se lo hicieron a la Orden.

Sé que tu fe es sincera y profunda, no un vulgar maquillaje, como el da tantos fariseos, y sé que, por eso, a veces te duelo. Pero también sé que estás orgullosa de mí, como lo estás de todos mis hermanos, porque hemos elegido cada uno nuestro camino, y lo seguimos sin dudar.

Sé que soy tu favorito ¿y sabes por qué lo sé? Porque todos, los cinco, cada uno somos tu favorito, y nunca dejaremos de serlo. Pase lo que pase.

Sé que nos quieres, pero también sé que por cada uno de nuestros hijos sientes incluso el doble, y todos te llenan de vida y alegría. Cris, Carmen, Yancy, Pablo, María, Sole, Carlos, Diego, Ale, Jaime, Jesús, Javier, Jorge...

Sé que tus amigas te envidian esa ristra de nietos alegres, gamberros, guapos, inteligentes, arrolladores. Y que no podrías querer más a ninguno de ellos, no te guardas nada.

(y sé, no obstante, que hay una que es especial, muy especial, y no te sonrojes, Ale, que tú también lo sabes)

Sé que no te callas las cosas, y si Cris y yo nos decidimos algún día a diseñar la enseña familiar, elegiremos el lema entre Cada año estás más calvo y A ver si adelgazas, hija.

;-)


Sé lo que es el amor por como os mirabais. Y como nos sigues mirando.

(Sé que, sin saberlo tú, siempre fuiste feminista, otra cosa más que aprendí de ti, como aprendió mi padre)

Sé que tienes una sonrisa genial, de esas que te iluminan el día

Sé qué nombre te dan algunas personas que te conocen por su trabajo, y por saberlo me siento orgulloso, y esta vez soy yo quien se sonroja.

Y me sonrojo cuando mi hijo me dice que mis albóndigas son casi tan buenas como las tuyas, después de todo fuiste tú quien me enseñó a hacerlas.

Igual que sé que, cuando llego al pueblo, si hay albóndigas, es que me toca una tarea de las duras, y quieres que vaya cogiendo fuerzas.

Sé que siempre te preocuparás por nosotros, y que el día que cierres los ojos, lo último que harás es, eso, preocuparte. Porque lo tuyo es un trabajo para toda una vida

Y sé que te quiero, Mamá, y nunca te lo diré bastantes veces. Como nunca te diremos bastantes veces...

... gracias

3 comentarios:

  1. Es precioso!!!!!! Genial y emotivo! Sois una familia increíble q tengo el placer de conocer! Un besazo,
    Lau

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  2. Qué bonito y que cierto todo. Y un beso muy gordo para la tía y por supuesto para ti. Ole ole y ole

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  3. Es que dan ganas de conocerla. Qué bonito.

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