martes, 20 de abril de 2021

20 DE ABRIL SIN 90


Como todos los años, toca mi entrada de aniversario y cumpleaños, y este año quero dedicarla a un tema que me toca mucho las narices en estas fechas. Y es que no imagináis el número de veces que alguien, al saber mi fecha de nacimiento, ha soltado, anda, como la canción de Celtas Cortos ¡qué guay, jajajaj!.

Y todas esas veces me he quedado con ganas de decirle, SÍ, COMO LA PUTA CANCIÓN DE CELTAS CORTOS

Que conste desde ya: me gustan Celtas Cortos. En directo me gustan incluso más y pese a mi torpeza y descoordinación brinco y bailo con ellos. La última vez, con nuestra hija, el año que se vino a vivir con nosotros, una noche de San Juan. Es un grupo que me trae muy buenos recuerdos. 

Y me diréis, pues de eso va precisamente la canción del 20 de abril, de los recuerdos, de la nostalgia, de los que ya no están, de lo que pudo ser y no fue. Y no digo que no vaya de eso, sino que es una canción tóxica hasta lo indecible.

Vamos a ir por partes. Se supone que lo que escuchamos es una carta que recibe una mujer, al parecer de un antiguo amor. Alguien que, deducimos, debió ser muy importante en su momento.

20 de abril del 90

Hola Chata, ¿cómo estás?

¿Te sorprende que te escriba?

Tanto tiempo, es normal

Pues es que estaba aquí solo

Me había puesto a recordar

Me entró la melancolía

Y te tenía que hablar

Mal empezamos. Alguien que no ha dado señales de vida en mucho tiempo, de pronto se asoma a decirte que esta tristón y solo y, claro, tenía que contárselo. Ese Te sorprende me viene a decir que es la puta primera vez que le escribe. 

Ya sólo por eso el tío me ha caído mal. He visto mucha gente así, desaparecen porque le aburres, o porque no tienen tiempo para ti, o porque se han olvidado de tu existencia, pero cuando las cosas le vienen mal dadas, asoman el hocico de nuevo. El caso típico del amigo que sólo te llama porque se acaba de divorciar y quiere recuperar el tiempo perdido

¿Recuerdas aquella noche en la cabaña del Turmo?

Las risas que nos hacíamos antes todos juntos

Hoy no queda casi nadie de los de antes

Y los que hay han cambiado

Han cambiado, sí

El estribillo es lo que la gente me suele señalar como un canto a la nostalgia. Y yo me pregunto ¿a la nostalgia de qué? la alusión a la cabaña y a las risas me vienen a sugerir que esa noche él y los colegas se cogieron un buen ciego, que corrió la bebida y la maría a raudales.

¿Que tendrían, 20, 25 años? Por ahí. Y hoy no queda casi nadie...

Mi amiga Elena recuerda muy bien esos años y esas risas, y recuerda también que todos sus colegas de esos años murieron muy jóvenes. Es lo que pasó con muchas de las pandis de colegas en esos años, en los finales 70, primeros 80 (son las fechas a que se refiere la canción, dado que escribe en 1990) Mi barrio no era tan chungo como otros de Madrid, pero ahí estaban también las pandas del parque, con la litrona. Con los años, les veías ir menguando, hasta que sólo quedaban un par de zombis en chandal, que aún te reconocían y siempre se acercaban a ver si tenías un par de duros. Al final dejabas de verlos, pero no dejabas de ver las jeringas por la mañana

Oh, los 80, los años guays, según nos cuentan los nostálgicos. Pues mira, yo no les tengo mucha nostalgia a los 80.

Y los que hay, han cambiado. Ya no se echan risas con él, quizás porque él es el que no ha cambiado. Y ahí sigue, a su puta bola, buscando quien le pague el próximo cuelgue.

Eso me lo confirma la siguiente estrofa, la más significativa

Pero bueno, ¿tú qué tal?, di

Lo mismo hasta tienes críos

¿Qué tal te va con el tío ese?

Espero sea divertido

Yo, la verdad, como siempre

Sigo currando en lo mismo

La música no me cansa

Pero me encuentro vacío

Es que ella fue muy importante para él, me dicen. Pues tan importante no le parecería cuando no sabe una mierda sobre su vida. Y suelta lo mismo hasta tienes crios, como quien dice, lo mismo te has comprado un patinete. 

Y que tal con el tío ese. Por el comentario entiendo que ella se hartó de sus mierdas, y conoció a otra persona con quien construyó una vida. Pero para él, es el tío ese, porque está claro que no puede ser tan guay como él, y sobre todo no puede ser tan divertido, con el tío ese no se echará tantas risas.

Y para que se note que él es auténtico, y que mola mucho más que el tío ese, le dice que sigue a lo mismo, a sus cosas y su música. Lo que significa que trapichea en lo que puede y cuando alguien le da bola saca la guitarra, a ver si le invitan a algo o hasta echa un polvo con alguna periquita.

De nuevo, he visto más de una vez al prota de la canción. Ese tío que fardaba, que era el centro de la fiesta, pero que no tenía vida más allá de la fiesta. De joven parecía guay, un espíritu libre, pero ahora sólo queda un gorrón que ha logrado alejar de sí a todo el mundo a fuerza de parasitarles. Si sus padres aún viven, se dedicará a sablearles, y si no le queda familia no tendrá ni donde caerse muerto. Por eso se siente vacío. Pero si le preguntas te dirá que es un artista y que es auténtico y que no se vende 

¿Recuerdas aquella noche en la cabaña del Turmo?

Las risas que nos hacíamos antes todos juntos

Hoy no queda casi nadie de los de antes

Y los que hay, han cambiado

Han cambiado, uh

El estribillo cobra más sentido. Probablemente esa noche fue su gran noche. Cuando se enrollaron, cuando el lo molaba todo, cuando todos esos que ya no están o, si están, han cambiado, le reían todas sus gracias y le consideraban el puto amo.

No tiene nostalgia de sus amigos, ni de ella. Tiene nostalgia de sí mismo, porque ese debió ser el momento álgido de su vida, y desde esa noche todo ha ido cuesta abajo. Cuando se mira en el espejo verá a un fantasma ojeroso y desgastado, al que seguramente le faltaran varios dientes, a quien  no le queda ni un perro que le ladre. Y se pregunta qué ha pasado, qué salió mal.

Así que no, no está haciendo un ejercicio de nostalgia. Está intentando aferrarse a ese recuerdo, a ver si así logra que esa chica a la que probablemente dejó tirada en cuanto se aburrió, le deje entrar de nuevo. Total, la vida que ha construido ella después de eso no cuenta, no es divertida. Ya se encargará él de traerle diversión.

Si te mola, me contestas

Espero que mis palabras

Desordenen tu conciencia

Pues nada chica, lo dicho

Hasta pronto, si nos vemos

Yo sigo con mis canciones

Y tú sigue con tus sueños

La vida de ella sin él, es un sueño, algo ficticio, no como sus canciones. Cuando está claro que lo que ese artista ha hecho durante los últimos ¿15 años? es vivir aferrado a una noche que, sospecho, para ella no debió ser tan guay como para quedarse anclada ahí. Lo que a él le parece un delito imperdonable, por eso quiere desordenar su conciencia. ¿CÓMO SE HA ATREVIDO A TENER UNA VIDA MÁS ALLÁ DE ÉL?

¿Recuerdas aquella noche en la cabaña del Turmo?

Las risas que nos hacíamos antes todos juntos

Hoy no queda casi nadie de los de antes

Y los que hay han cambiado

Han cambiado, sí.

Recuerdo bien mis noches en la cabaña del Turmo, he estado cien noches allí. Y algunas están grabadas a fuego en mi piel y me siguen doliendo como si la quemadura fuera de ayer mismo. No son recuerdos lejanos, de cuando era joven y todo parecía más brillante, sino momentos tan cercanos que casi los siento en mi piel. 

No las he olvidado. Todas y cada una de esas noches siguen en mi memoria, y seguirán ahí, hasta que mi cabeza empiece a fallar, como bellos recuerdos y como parte de mi camino. Pero ni mi camino ni mi reloj se detuvieron ahí. Seguí caminando, y esos recuerdos, incluso los más dolorosos, no me lastran, simplemente me acompañan.

La vida no se detuvo en la cabaña del Turmo. Para algunos siguió un poco más, y ahí se acabó su camino. Para otros, para la mujer a la que va destinada esa carta, fue sólo una noche más. Sólo el artista ha hecho de esa noche el centro de su universo. Porque el resto de su vida, a partir de ahí, no vale una mierda, y necesita que la vida de ella también sea una mierda, que para ella sólo exista la puta noche en la cabaña del Turmo. Es decir, que sólo exista él.

Incluso el vídeoclip, en su momento, reflejaba esa toxicidad de mierda, ya que siempre que sale él todo es colorido, alegre, bohemio, mientras que ella vive en blanco y negro, y esclavizada, por eso se ha ido a leerla al parque, no sea que el tío ese sepa que su mágico amante de juventud la ha escrito.

Pues ¿sabes una cosa, cretino? En mi cabeza, cuando ella se aleja, tu carta acaba en una papelera, junto con el sobre y tu dirección. Así que sigue con tu guitarra en tu fantasía, pero no esperes respuesta. Porque la vida no se construye en base a una noche olvidada, con unos colegas que acabaron en una cuneta con una jeringa en el brazo y de los que probablemente no recuerdes ni el nombre, porque para ti solo eran figurantes. Y si la vida de ella no es buena, ya hará ELLA por cambiarla, sin necesidad de que la rescates.

Ni tu historia es tan importante, ni tu vida es el centro de nada, ni puedes regresar a aquella noche. De la cabaña no quedan más que algunos escombros, y cuando mañana te mires en el espejo seguirás sin reconocerte.

Y ella no estará a tu lado, porque los caminos no se desandan.


martes, 6 de abril de 2021

"¡NO ES REALISTA!"



Cada poco tiempo vuelve a surgir el debate sobre lo forzado que resulta la inclusión de personajes LGTB o racializados en obras de ficción. No hace mucho tuvimos las quejas de los de siempre porque la serie de los Brigdgert... los Bridg... los Bridterg... la de los baroneses follarines, incluía personajes afro en el entorno de la Regencia. También hubo protestas porque al final de EndGame el Capi entregara su escudo a Falcon en vez de a Bucky y, por supuesto, hubo voces airadas por la insinuación de que Bucky, el Soldado de Invierno, tuviera algún secreto deseo gayer por los firmes y redondeados glúteos de Steve Rogers.

Tenemos la misma murga cada vez que en alguna obra sale un personaje femenino, no ya protagonista, sino con verdadera relevancia más allá de ser la pitufina, la excusa desencadenante (secuestrada, asesinada, violada...) o el interés romántico. Si además ese personaje es homosexual, tendremos asegurado el grito en el cielo, como se dio con los escasísimos fotogramas en los que dos mujeres se besaban al final del Episodio IX.

Claro que ninguno de los borregos que se apuntan a las protestas  va a decir no quiero ese tipo de personajes porque soy racista/machista/homófobo/transfobo. No, siempre van a buscar alguna justificación, y la favorita de todas ellas, a la que más se aferran es gritar muy alto ¡no es realista!

Lo de que no es realista que haya, por ejemplo, homosexuales, africanos o mujeres fuertes en una historia me hace mucha gracia, porque viene a presuponer que ese tipo de seres son personajes de ficción completamente inverosímiles. En el caso del solitario beso sáfico del Episodio IX, si tenemos en cuenta que entre un  5 y un 10 % de la población se puede etiquetar como homosexual, y ese porcentaje sube mucho si pensamos en la gente bisexual, lo que es poco realista es que durante 9 películas sólo haya aparecido una pareja de lesbianas EN TODA LA PUTA GALAXIA, al igual que es bastante ridículo que la inmensa mayoría de los humanos de esa saga sean caucásicos, cuando esa etnicidad es minoritaria en nuestro universo REAL, donde por cada paliducho hay al menos seis personas con tonos de piel más oscuros.

Y no digamos nada de la gordofobia, que para un señor entradito en carnes que hay en toda la saga me lo liquidan en la primera peli. Y encima me le apodan Porkins, jaja qué graciosos y chispeantes, a lo mejor su segundo apellido era Fatty.

Lo más flipante es la profunda ignorancia que suelen demostrar esos señores (porque en un 95,73% son señores) sobre las materias que tanto gustan de comentar. Lo de Falcon como nuevo Capitán América ES CANÓNICO en el universo Marvel, se ve que esa etapa de la serie se les debió quedar en el montón delecturaspendientes (si es que saben leer, claro está). Por no mencionar que cuando se estrenó Mad Max FuryRoad los quejumbrosos protestaban porque estaban metiendo con calzador una mujer fuerte que le robaba el protagonismo al héroe. Vaya, no me digas ¿Como Tina Turner precisamente en la anterior película de Mad Max, Más allá de la Cúpula del trueno? Y no me suena que hubiera quejas en ese momento. Pero claro, en los 80 nadie ponía en duda la normatividad masculina, una Tina Turner o una Sigourney Weaver sólo eran gotas en un océano de machotes. En cambio, presentar un equipo de mujeres cazafantasmas es coger su infancia, violarla, quemarla y arrojar las cenizas a una incineradora

Bueno, algunos ya se sentían amenazados por esas fechas . En esos años estaban en los kioskos los XMen de Claremont. Todo iba bien, las chicas llevaban lindos uniformes (muy poco prácticos) y sabían estar en su sitio. Pero entonces Ororo se hartó, se rapó la cabeza, empezó a vestir macarra, y se preguntó porqué tenía que obedecer las órdenes de un blanquito estirado y reprimido. Al final, y tras darle una buena paliza* al pelma de Scott Summers, se alzó como líder indiscutible del grupo y las cosas empezaron a cambiar. Pícara ya apuntaba maneras, Rachel Summers se convirtió en el nuevo avatar de Fénix, y hasta Dazzler, el personaje con la base argumental más patética** del universo Marvel, se convirtió en un puntal del equipo.

Esto os va a dejar flipando, resulta que LOS FUTUROS SEÑOROS FUERON ADOLESCENTES QUEJICAS. Aún recuerdo las protestas en la sección de cartas de los lectores, que se resumían en: ésta ya no es mi patrulla X, ahora es un grupo de chicas, ESO NO ES REALISTA. 

O sea, que en un universo de ficción en el que un villano adquiere los poderes de una morsa, Leonardo Da Vinci viaja en el tiempo y unos alienígenas verdes se convierten en vacas y son ordeñados, el que una mujer tenga capacidad de liderazgo no es realista

Traducción, exijo que todo lo que lea, vea, consuma, me representa a mí, pobre varón blanco heterosexual duramente oprimido. Y desde entonces ya no han dejado de quejarse. Imagínate que no les dejan hacer ya ni chistes de maricones, de señoras que tienen la regla, de violaciones, de negros, de retrasados... qué vergüenza de corrección política, que no me deja reírme de los que no son como yo y ya no me puedo sentir identificado con absolutamente todo lo que veo. ES UNA PERSECUCIÓN

En fin, no vale la pena ahondar en el tema mucho más. Los quejicas van a seguir con sus letanías porque, por mucho que les joda, la sociedad ha seguido caminando en vez de quedarse congelada en el punto que a ellos ya les iba bien, y personalmente no creo que valga la pena intentar razonar con ese tipo de gente. Si alguien ve creíble que el Dios del Trueno haga chistes colgando en una jaula, pero le parece inadmisible, imperdonable y altamente ofensivo que una valkiria sea negra***, no hay nada que rascar ahí. Donde no hay mata, no hay patata.

Para terminar, me gustaría hacer una reflexión personal. A primeros de los 90, cuando se estaba publicando Sandman, A Game Of You, un crítico publicó una reseña de la serie en la que, como única queja, planteaba que Gaiman estaba obsesionado con personajes muy marginales. Prácticamente en cada capítulo había aficionados al BDSM, drogadictos, lesbianas, gays, trans****... y eso no era realistano hay tanta gente así, la mayoría somos normales. Yo tendría entonces ¿26 años? y pensé, bueno, sí, es cierto que me mete un montón de personajes muy minoritarios, pero no lo hace porque sí, tiene sentido dentro de la historia.

Bueno, pronto cumpliré 55 y la mayor parte de la gente con la que me relaciono es gay, lesbo, ace, bi*****, BDSM, trans... no hay mucha gente racializada******, pero sospecho que eso es puro azar estadístico. Y desde luego mi propia vida no se corresponde precisamente con lo que la gente bien pensante considera normal.

Eso no quiere decir que mi experiencia sea representativa. Evidentemente hubo un momento a partir del cual me aparte del promedio. Pero no tuve que atravesar océanos ni desiertos, me bastó dar un pasito fuera de la normalidad, para descubrir que el mundo era un lugar maravillosamente rico y variado, a todos los niveles.

En cualquier caso, tengo claro que quien quiera que esté guionizando mi vida está haciendo un trabajo excelente.  A poco que abras un poco la ventana y te asomes fuera de la normalidad, el mundo es más vivo, más colorido y mucho más interesante.

Y mira, si eso no os parece realista, sólo puedo desear que disfrutéis mucho de vuestra normalidad. Por lo que a mí respecta, VIVA LA IRREALIDAD.

* Una paliza doblemente meritoria porque Ororo carecía de poderes en esa etapa de la saga, y quedó tan claro que Ororo era la fucking Ama que Scott se fue del grupo porque a él, lo de que mandara una señora, le rompía su frágil masculinidad.

** Era una chica discotequera que convertía la música disco en rayos de luz. O sea, el Hombre Topo, a su lado, es un coloso mitológico.

*** Ni os imaginais la cantidad de señoros que, con el estreno de Thor Ragnarok, resultaron ser expertos eruditos en mitología nórdica, y prootestaron por la falta de realismo.

**** Sí, en la cabeza de lo señoros está todo mezclado, orientación, género, kinks, adicciones... sospecho que el pegamento que une todo eso es su convicción de que todo el mundo se lo pasa mejor que él, y eso jode*******.

*****Por si alguien no lo sabía, soy bi.

******Pero en mi propio entorno familiar directo hay mucha más variación étnica que hace tres décadas. También esa normalidad va diluyéndose

******* Uno de los elementos más curiosos de la homofobia es la envidia de los machos hetero, convencidos de que los gays follan muchísimo más que ellos