Mujer iroqués

domingo, 23 de junio de 2013

SI YO FUERA PAPA EN LUGAR DEL PAPA... (II) Cambios Doctrinales



Nos, MasterFucking the First, Pontifex, Pastor del rebaño de Jesús, calzado con las Sandalias del Pescador por la gracia del Espíritu Santo...

... y algunos dineros generosamente distribuidos entre el colegio cardenalicio...

... y un uso prudente y discreto de algunas fotografías comprometedoras...

... y algunas cabezas de caballo (grazie, don Corleone, enseguida nos ocuparemos de su asuntillo)

... vengo en proclamar que es hora de inquietudes y aguas revueltas para la barca eclesial, y pues que el señor ha puesto en mis torpes manos su timón, es menester hacer algunas reformas para sobrevivir a estos años tempestuosos.

Como primera medida proclamo con gozo una amnistía general en el purgatorio.

No pongais esas caritas de O.O ¡Claro que puedo hacer eso! Durante siglos la Iglesia vendió indulgencias para las ánimas del purgatorio, y el negocio de las misas de difuntos se basa en en la posibilidad de redimir pena. Y digo yo ¿no es la caridad virtud que debe practicarse sin tasa? Pues para generoso, el menda. Hale, todos fuera, al cielo en tropel, que invita el Papa. De acuerdo, habrá algún que otro problemilla de realojo pero digo yo que con un buen plan de reordenación urbana eso se resuelve facil ¡San Pedro, allá que te van!

Además le damos unas merecidas vacaciones a la señora madre de Chus, que ya está bien, hombre, 2000 años de portera del purgatorio sin un sueldo base razonable ni semana inglesa.

Me diréis ¿y el infierno? Hombre, pues tentado estoy, pero con tanta coña, que si es una metáfora hoy, que mañana ya no lo es, que existe, que no existe, que es endotérmico, que es exotérmico... vamos a dejarlo tranquilo por un par de pontificados. Herr Ratzinger dijo que existe, y de momento Punto Pelota.

(Además tengo apalabrado con una amiga asturiana* que si ambos nos condenamos compartiremos caldera unos eones para follar como Luzbel manda y sin prisas, así que a mí ya me viene bien como está).

Segunda medida. En aprovechando que las próximas JMJ se convocan en Rio de Janeiro, he tomado dos decisiones:

1.  Encargarme una vestimenta talar más fresquita, que aune la ligereza con la elegancia, sobre la idea del sacro tanga (y poco más) para encabezar con dignidad una buena samba,

2. Abandonar la polvorienta liturgia latina e instaurar O Novo rito Brasileiro, con bailes sensuales, ritmos sabrosos, caderas bamboleantes, cachaza y absolución general de todo pecado contra el Sexto cometido en fechas de carnaval. El resto del año, un poco más de comedimiento pero ¡qué menos que un par de semanas de hacer la vista gorda al año! Por la misma, pido a Carlinhos Brown que acepte un capelo cardenalicio y vaya anotando ideas.

De aquí se sigue que el sacerdocio necesita nuevos vientos. Necesitamos sangre joven, con ritmo, y una buena manera de lograrla es duplicando la oferta: sacerdocio femenino desde ya. Que sí, que Juan Pablo dijo que no, pero también dijo que no había infierno como tal y mira que poquito tardó Bene en puntualizar ese tema ¿eh? Para lo que queremos sí se puede ¿eh? Pues para esto también. Y no me vengan con que el sacerdote encarna a Jesús y por eso debe ser hombre y si no el creyente no logra identificarse y bla, bla bla... el muchacho era bastante pijín y tirando a metrosexual. No me crean a mí, sino a Leonardo da Vinci, vean, vean... No me digan que una guapa presbitera no puede encarnar al señor con dignidad y suaves curvas

Nota mental: rediseño de la ropa de misa. Concepto de base, minifalda unisex.

Para finalizar este paquete de medidas de urgencia, y a fin de agilizar la burocracia de la confesión, es menester recortar servicios y sacar de la cartilla algunos pecados. El primero de todos el de tomar el nombre de Dios en vano. Como español, vivo en el único país que trata al señor de tú a tú, por su nombre de pila (MeCagoEn) así que creo que podemos pasar por alto ese tema y ya puestos todo el concepto blasfemia. El lenguaje con blasfemia es rico, colorido y musical. Y los de la asociacion Tomas Moro pueden dedicar su tiempo y esfuerzo a la cría del colibrí andino, o matar el rato haciendose pajas sin cargo de conciencia porque...

... ¡Fuera la masturbación del Sexto Mandamiento! Todo ha sido un fenomenal malentendido, el pecado de Onán no fue pelársela sino practicar la marcha atrás. El Señor le castigó por derramar su simiente en el suelo, y muy bien que hizo, que ese marrano dejaba el parquet impresentable. Seguirá siendo pecado correrse sin garantizar la posterior limpieza, pero con tener a mano un cleenex, tema resuelto. ¡A sacarle brillo a la zambomba, perillanes, que se os ve con ganas!

Dicho sea de paso. Las mujeres no derraman simiente, ni en el suelo ni en ningun lado, así que idem, y sin necesidad de pañuelitos.

Para rematar, en un gesto de ecumenismo he decidido adoptar las normas alimentarias del culto de Offler, el dios cocodrilo. Retiramos la abstinencia, el ayuno y la prohibición de la carne en viernes, para adoptar como único alimento prohibido el brócoli ¡fuera ese impío brócoli de vuestras mesas, pecadores, que sois unos pecadores!

Y bueno, tengo algunas cosillas más en cartera, pero eso ya lo dejaremos para cuando volvamos de Brasil. Si me disculpan, he quedado con unas feligresas cariocas para que me vayan enseñando los movimientos básicos, que soy de natural torpe (el Señor ¡ay! castiga mi orgullo con confusion de pies) y me llevará un tiempo estar a punto para presidir las jornadas. 

Que Él os acompañe y guíe siempre vuestros pasos (bailones)

pepepepepepe pepepepepepe pepepepepepeeeee
pepepepepepe pepepepepepe pepepepepepeeeee
Um par neginho na strada.
Um par pra ca y pra la.
Vigem que coisa mais linda.
Um par neginho começando a andar,
começando a andar, começando a andaaaaaaaar.


* tu tranquila, S. Mientras esté en mi mano, nadie nos deja sin caldera

jueves, 6 de junio de 2013

BELLEZA





Un día, hace tanto que no recuerdo, volviendo del colegio, me quedé pasmado mirando una mancha de grasa en un charco. La luz y el aire le sacaban reflejos irisados.

Desde entonces encuentro belleza en los sitios más insospechados, en los momentos más imprevistos. En un revoloteo, una piedra, una sombra, en el ir y venir del agua.

Pero no logro que otros la vean. Intento explicarles, señalarla. A lo sumo me dicen, sí, es bonito, o más a menudo, oye, pues es curioso. Normalmente me miran raro. Yo lo siento por ellos

Sólo una vez, una noche, logré que una mujer mirara a través de mis ojos.

Así que, si alguna vez me quedo pasmado delante de ti, como si me hubiera desconectado... tranquila, no me estará dando un ictus. Es sólo que estaré contemplando en ti algo que nadie más puede ver.

O tal vez sí, tal vez un día otra persona te mire igual.

Si sucediera, por favor, sonríele de mi parte, y si te sientes bien, regálale un beso

Que sepa que no está solo.

martes, 4 de junio de 2013

SI YO FUERA PAPA EN LUGAR DEL PAPA ... (I) Marketing y financiación



... y podría serlo, ojo. No hay ningun impedimento en la doctrina al respecto: cualquier bautizado puede ser nombrado Sumo Pontifice. Así que ya me veo con tiara, sandalias pescatoriales y triple corona.

O me vería así si la Iglesia aceptase por fin el reto de la modernidad y se decidiese a sacudirse de encima el polvo de los siglos. Hablan de crisis de fe, de pérdida de valores... ¡paparruchas! Lo que sucede es que Roma no sabe vender su producto.

Señores del colegio cardenalicio ¿quieren volver a ver las iglesias petadas de fieles, el cepillo rebosante de billetacos, las arcas de Roma llenas a reventar, las procesiones tan prietas de público que cueste mover el santo? Pues en el próximo cónclave, no desperdicien su voto ¡EPISCOPHAGUS PONTIFEX! ¡AUR AUR AUR!

Y como primera medida, elegir nombre. Un buen nombre, ya vale de juanes, pablos,  juanpablos, benes... un nombre potente, sonoro, que inspire respeto y devoción... PUTOAMO. PUTOAMO PRIMERO.

Sonoro, molón y fácil para las coregrafías. Las catolicfangirls solo tienen que repetir PUUUUTOÁAA-MO (plasplas-plasplasplas) cuando me vean pasar en el papamov... un momento, segunda orden papal: al desguace con el papamóvil. Basta de fasto y oropel, circularé en una BMW R75 conducida por una monja maciza con recias botarras de motera, hábito escotado y minifaldero y un VATICAN  HELL'S  ANGELS en la espalda. Yo, desde el sidecar, iré bendiciendo urbi et orbi a las multitudes enfervorecidas. Y los obispos pueden seguirme al trote, que están tirando a gordacos y les vendrá bien un poco de ejercicio.

¿Veis por donde van los tiros? La Iglesia no necesita kikos amongolados, catequistas aburridos o canonizaciones multitudinarias. Necesita MARRRRRRRCHA para llenar el redil.

Pensemos en la misa estándar, en su versión supuestamente festiva, cuando la parroquia tira la casa por la ventana y hay musica. O sea, la monja de la guitarra y el coro de señoras mayores desafinando el quealegríiiiiacuandomedijeeeerron ¿eso es una fiesta? #facepalm.

Hay que aprender de las misas Gospel y montar coros en condiciones, que canten con alegría, que le pongan espíritu y te fuercen a mover las caderas y batir palmas. Y en las misas de tarde y del gallo, caña eléctrica y buen metal. Basta de adaptar sosaineces de los beatles, desde ahora sólo buenos clásicos como ACDC, Metallica, Iron Maiden... una iglesia de noche pide guitarras que hagan temblar las cristaleras y calaveras cerca de las velas ¡aprovechemoslo y tengamos llenazo de jevis nostálgicos y metaleros satánicos!. Me diréis que esos no van por la misa, pero una vez dentro ya es cosa del párroco llevarles al la fe ¿o es que tengo que daroslo todo hecho?

Hace poco estuve en una comunión. Cuando los infantes, en traje de novia enana o almirante con chorreras, entraron en la iglesia, fueron recibidos con una cancioncilla sosainas de bienvenida. ¿Porqué desperdiciar las posibilidades del merchandising? Imaginemos la misma escena con los chavalines vestidos de tropas de asalto de Star Wars (blanco, adecuado para comuniones ¿no?) entrando al ritmo solemne de la marcha imperial. Y en las comuniones de postín podríamos alquilar los servicios de Ratzinger vestido de Emperador, esperando a sus huestes al pie del altar. El pobre se aburre en Castelgandolfo, y así se sentiría útil y podría aportar unos dinerillos para las arcas pontificias, tan necesitadas de monetario. Entre eso y un buen acuerdo con LucasFilm sacaríamos unos ingresos muy saneados.

Sería interesante contar para estos eventos con amantes del cosplay que den ambiente, por ejemplo escoltando a los imberbes catecúmenos con los rojos uniformes de la guardia imperial, o en alegre disfraz de wookie. Y ni siquiera habría que pagarles, con poner a la monja de la guitarra (ahora ya sin trabajo) cerca de la puerta esos patéticos pringados dignos jóvenes ya se sentirán felices, nunca habrán estado tan cerca de una hembra desde que les parieron.

Hablando de ingresos, hay otra fuente de negocio que hasta ahora ha sido ignorada olímpicamente por el Vaticano. El Índice de Libros Prohibidos. No, no he bebido demasiado vino de misa, pensadlo un poco.

¿Qué ha pasado con las obras condenadas por el celebérrimo Índice? Que se han convertido en BestSellers. Ya sea el Sidereus Nuncius, el Origen de las Especies o El Capital, todos ellos fueron condenados y todos ellos fueron éxitos de ventas. Ojo, no de lectura, de ventas, que es lo que le mola a los editores. Así que no cuesta mucho darse cuenta de que un buen agente literario tendría interés en que el Papa condenase furiosamente alguna obra literaria de sus representados, o por el contrario alabara con entusiasmo la firmeza doctrinal de las obras de la competencia, porque el público no sabe mucho de latines, pero si declaras que una obra es felizmente conforme al dogma, a todos les sonará a ladrillo amuermante.

Quien dice libros dice pelis o música. Lás páginas de crítica cultural de L'Osservatore Romano pueden convertirse en una mina de oro, solo hay que negociar bien los acuerdos y si de algo saben los obispos es de componendas bajo mano así que ¿a qué estamos esperando? ¡Si ya lo estamos haciendo a diario, anatemizando cualquier cosa mínimamente divertida, pero sin cobrar por ello!

Las canonizaciones también pueden dejar unos réditos interesantes. Pongamos un precio razonable, un beato por 5000 euros, un santo por 7500 de nada ¿quién se negaría a tener un familiar en los altares por unos dinericos de nada, que te puede adelantar cofidis? Y si luego sus cobradores te rompen las piernas, resignación hijo mío, piensa que te están apaleando por la fe.

Me diréis que así podría canonizarse a gente indigna pero, entre nosotros, así en petit comité, si ya hemos beatificado a una sádica sanguinaria como Teresa de Calcuta o canonizado al hideputa de Cirilo de Alejandría, un pecadorcillo más o menos tampoco debería preocuparnos. Total, el señor ya reconocerá a los suyos ¿no?.