Mujer iroqués

lunes, 31 de mayo de 2010

La credibilidad del paleoarte (I)






Hace un par de semanas alguien me preguntó por la fiabilidad que tenían las recreaciones de animales extinguidos. Dado que no es la primera vez que oigo esa cuestión creo que puede ser interesante explicar en qué nos basamos cuando hacemos una paleoreconstrucción.

Hay una premisa básica: la veracidad es inversamente proporcional al tiempo transcurrido. Los restos de un animal extinguido hace 10000 años serán más fáciles de interpretar que los de uno desaparecido hace 200 millones. El más reciente será similar a los animales de hoy en día y podremos extrapolar muchos datos, en cambio los remotos pueden ser tan ajenos a nosotros como un extraterrestre y apenas tendremos referencias actuales.

He hablado de los seres modernos: la interpretación de un ser extinto se hace en base a la anatomía comparada, es decir, al análisis anatómico, funcional y mecánico de los animales actuales, y la aplicación de ese análisis a los restos fósiles. Si encontramos una mandíbula perteneciente a un rinoceronte extinto sólo con ella sabremos que se trataría en efecto de un rinoceronte, un hervíboro con tres dedos en cada extremidad y aspecto robusto. Comparando el tamaño de la mandibula con la de los rinocerontes actuales podremos calcular razonablemente su tamaño real, y en base al desgaste de sus dientes conoceremos su edad. A la hora de reconstruirlo con mayor exactitud sería preferible disponer también de algún hueso de las articulaciones, para saber si era de piernas cortas como los rinocerontes modernos o largas como los indricotéridos gigantes del mioceno, y si tuviéramos además la parte delantera del cráneo sabríamos si tendría o no cuernos, aunque estos se hallaran rotos o ausentes, porque dejarían unas marcas características en el hueso que nos indicarían su tamaño y número.

Supongamos ahora un animal muy antiguo, como el dinosaurio pelecanimimus, uno de mis amores secretos. Este terópodo se conoce por restos parciales hallados en Cuenca, incluyendo cabeza, cuello, la mayor parte del tronco y los brazos. Precisamente los brazos permiten determinar que se trata de un ornitomímido basal, un pariente de los gallimimus que pudimos ver en Parque Jurásico, y eso nos dice cómo recrear las partes del esqueleto que no conocemos. Todos los ornitomímidos conocidos tienen piernas muy largas, similares a las de las ratites modernas (avestruces, ñandúes…) y podemos calcular su longitud en base al tamaño del cuerpo.

Cuando hice la primera versión las piernas quedaron cortas pero no pude verlo hasta que programé un ciclo de carrera para el modelo: al dar la zancada mi ejemplar se veía obligado a levantar mucho el fémur, algo que ningún animal corredor haría, porque resultaría muy costoso en términos de energía. Deduje que las tibias eran demasiado cortas y las alargué en un tercio: con eso bastó para que el movimiento del animal fuera realista. Hay un cierto margen de error, ya que si estos animales eran velocistas la tibia debería ser aún más larga, pero si se trataba de corredores de fondo sería algo más corta. Adicionalmente el grado de osificación de los huesos del brazo indicaba que se el fósil correspondía a un ejemplar joven que podría haber crecido hasta un 50% más, con el consiguiente cambio de las proporciones.

Éste fósil además dejó una marca en la piedra que perfilaba el contorno de la cabeza cuando murió: eso nos permite saber que tenía una cresta en la nuca y una bolsa bajo el cuello. Su dentición era distinta a la de sus parientes, ya que en vez de un pico desdentado presentaba una multitud de dientes diminutos que empezaban a fundirse formando un borde contínuo, lo que nos da una idea acerca de como evolucionó la mandíbula en esta familia.

He hablado de lo que podemos saber directamente de los huesos. A partir de aquí entramos en el terreno de las deducciones. La primera, en el caso del dinosaurio, es sobre el plumaje. No hay evidencias fósiles de plumas en ningún ornitomímido, pero estos animales son coelurosaurios y tenemos restos emplumados en todas las demás ramas del clado, luego podemos aventurar que pelecanimimus no tendría plumas complejas pero sí algún tipo de cobertura básica, aunque podríamos representarlo con la piel desnuda.

Volvamos al rinoceronte. Si se trata de un coelodóntido es probable que estuviera cubierto de un espeso pelaje, ya que los primeros hombres retrataron rinocerontes lanudos. En cualquier caso sabemos que tendría una gruesa piel y su color, probablemente, sería grisaceo o parduzco, ya que todos los rinocerontes modernos presentan esa coloración, neutra y sin marcas. Supongamos que en vez de un rinoceronte tenemos los restos de un dinoterido primitivo: si la estructura de sus hombros y cuello le impedirían agacharse para beber agua, sabremos que tenía una trompa y conoceremos su longitud aunque no tengamos los restos de la cabeza.

20 comentarios:

molinos dijo...

Alucino con esto.

José Antonio Peñas dijo...

Mujer, uno es profesional y trata de ofrecer al cliente un producto digno, pero es que tendrías que ver las cosas que cuelan por ahí.

Cuervo dijo...

Genial post, En Pabluratops ya haníamos estado discutiendo acerca de esto, Yo no puedo creer que la gente aún crea que los paleoreconstructores se basan sólo en los huesos.

" Si encontramos una mandíbula perteneciente a un rinoceronte extinguido sólo con ella sabremos que se trataría en efecto de un rinoceronte, un hervíboro con tres dedos en cada extremidad y aspecto robusto"

Sería extinto no?
Y si sólo hallas una mandíbula ¿Cómo demonios sabes que tendría tres dedos Y aspecto robusto?
Los rinocaerontes Actuales tienen 3dedos, pero antiguamente tenían mas dedos y no todos eran robustos.
Aunque depende de lo que le digas rinoceronte, pues el paraceratherium no era de la familia del rinoceronte, ni era un rinoceronte

José Antonio Peñas dijo...

Gracias, De Argentina. Puntualicemos un poco.

Al decir rinocerontes me refiero a lo que se conoce como rinocerontes verdaderos, es decir, la familia Rhinocerotidae. Las familias emparentadas como los hiracodontideos tienen diferente número de dedos, pero no son rinocerontes propiamente dichos, aunque algunos sí tenían tres dedos (estoy pensando en indricotherium ¿Será que la fórmula de tres dedos es más eficaz para grandes pesos?)

En efecto, hay animales que recuerdan mucho en sus proporciones a los rinocerontes modernos sin tener nada que ver con ellos, como los arsinoiteros, que son bastante más antiguos y tenían cinco dedos. En general la gente ve un bicho gordote con cuerno nasal piensa "rinoceronte primitivo" y suelen equivocarse, como pasaba con los de "Ice Age", que si mal no recuerdo eran brontoterios.

Respecto a la robustez, incluso los rinocerontes más gráciles como r. etruscus o stephanorhinus son animales comparativamente más robustos que otros ungulados de su tamaño, sin llegar al aspecto rechonchote de los rinos actuales. Lo que no podemos saber a ciencia cierta es si todos tendrían cuernos, ya que se conocen animales sin ellos.

José Antonio Peñas dijo...

Y sí, sería extinto. Ahora lo editaré, gracias por el toque

Cuervo dijo...

De nada :-}
Claro si hablas de un rinoceróntido sería muy similar a los rinocerontes actuales, pero como nombras "a los indricotéridos gigantes del mioceno".

El elefante tiene más dedos, los artiodáctilos tienen número par y algunos titanosaurios no tenían , por tanto no hay fórmula mas eficaz para el tamaño :)

José Antonio Peñas dijo...

La costumbre, DeArgentina, la puñetera costumbre. He metido la gamba porque siempre que se menciona al indricotérido se añade la coletilla "rinoceronte gigante" y no es un rinoceronte verdadero, pese a estar emparentado con la familia. Pero no lo voy a corregir, porque este intercambio es interesante y si elimino el error no se entendería (aunque aparte de los frikazos como nosotros no creo que le esté interesando a nadie más, pero mira, ellos se lo pierden)

José Antonio Peñas dijo...

Por si algún lector o lectora ajeno a la paleontología se está preguntando como leches se identifica una mandíbula de rinoceronte si nos falta todo el resto del animalillo, la respuesta está en los dientes: los rinocerontes presentan una dentición posterior de hervíboro, con molares y premolares aptos para triturar la vegetación, pero carecen de incisivos, una característica que les distingue bien del resto de ungulados.

Cuervo dijo...

ah ok!,
Si ellos se lo pierden, ojalá los blog fueran más masivos y las personas se interesen en las charlas muy interesantes que se dan en ellos.

Supongo que al paraceratherium le ponen el mote de rinoceronte por su enorme tamaño y por estar un poco emparentado, pero es como poner que los damanes son elefantes :-}
En Walking With Beast lo titulan de
"el rinoceronte que quizo ser jirafa" :D
Entonces el hyracodon sería "el rinoceronte que quizo ser pony"
el damán sería el "elefante que quizo ser rata " y así sucesivamente XD

NO ME GUSTA PONERME PESADO, pero los rinocerontes actuales sí conservan sus incisivos, e incluso el R. de Sumatra conserva los caninos.... Los únicos dientes que perdieron fueron los incisivos del maxilar y no todos los rinocerontes :-}

José Antonio Peñas dijo...

Eso es nuevo para mí, tenía entendido que los incisivos del maxilar inferior faltaban en todos los rinocerontes.

José Antonio Peñas dijo...

Ya veo: la pérdida de incisivos se da en las especies más occidentales. Acabo de ver algunos cráneos de los de sumatra y los incisivos son evidentes. Eso no invalida mi argumento pero lo limita: un maxilar sin incisivos pertenece a un rinoceronte, pero eso no excluye que uno con incisivos también lo sea. Siguen siendo maxilares fácilmente identificables, con esa impresionante batería de masticación y la punta aproada (si mal no recuerdo los indricoterios tienen la punta invertida)

Cuervo dijo...

Sí que lo invalida, tú dijiste mandíbula no maxilar , y todas las mandíbulas de rinocerontes tienen incisivos :)
Sería rarísimo encontrar una mandíbula de rinoceronte sin incisivos :)
Que conste que no quiero discutir y que yo entiendo bien de lo que hablas, porque luego a los blogeros les caigo gordo :-}

José Antonio Peñas dijo...

Bueno, aquí creo que se trata de términos equivalentes. Yo entiendo por mandíbula el hueso maxilar, es decir el hueso que articula con el cráneo en el condilo, ya que la parte superior de la boca forma parte integrante del cráneo y carece de mobilidad (aunque creo recordar qu en el flamenco si la tiene, Gould lo mencionó en uno de sus ensayos más antiguos). Por eso menciono inicialmente "si encontramos una mandíbula" y añado algo más adelante "si tuviéramos además la parte delantera del cráneo".

José Antonio Peñas dijo...

Acabo de verificar en la Rae y mandíbula y quijada son sinónimos.

Cuervo dijo...

"Yo entiendo por mandíbula el hueso maxilar" ok :)
Si no sólo el flamenco , también algunos loro y otras aves :)

Anónimo dijo...

Hala, qué genial, paso aquí desde el blog de Molinos por curiosidad por la foto, y me doy de bruces con un paleoilustrador, lo de la paleoilustración me trae de cabeza desde que le compré al nene el primer libro de dinosaurios (por las ilustraciones claro) y me lo leí yo, bueno porque el nene tiene 1 año...bien, no tenía gran interés en estos bichejos, alguna cosilla, pero desde que vi el Tiranoetc con plumas de la portada estoy que no paro (muy bonicos los folladores de la imágen del blog). Y siguiendo con la sarta de cosas inconexas que estoy contando, estoy venga a darle vueltas a lo de cuándo le salieron las orejas a los premamíferos, perdón sinápsidos, y los hocicos?, esto me causa una curiosidad tremenda.
Una queja se está poniendo de moda entre algún enteradillo lo de hablar de las aves como de reptiles sin más, sin referirse a los arcosaurios, me parece cosa de pijos. Aunque es muy divertido saber mucho de cladística, más genial es saber explicarla.
Ah, y no me meto en el paleofreak yo no jarta de paleoblogs, tate tate, que no me van las discusiones, me pico mucho y no sé para qué, que lo que sé viene de la wiki y de ser friki de nacimiento, lo mío no da para más.
saludos y admiración, también dibujo cuando puedo pero a la antigua usanza, lápiz y photoshop.

Susana

José Antonio Peñas dijo...

Hola, Susana. Encantado de saludarte.

¡Ufff! Las orejas, nada menos. Es dífícil de saber porque los tejifod blandos fosilizan muy raramente. Podemos extrapolar que en el momento en el que tenemos ya diferenciados los huesos del oido habría orejas, pero la aparición de las mismas puede tener lugar en cualquier momento de la transición mandíbula-oído.

Lo mismo vale para el hocico: un craneo de mamífero con la estructura nasal "moderna" debería tener hocico, pero el cambio dura varios millones de años.

Mujer, no sé si "A la antigua usanza" es una frase que coincida mucho con Photoshop. Yo es que soy tirando a viejuno en el oficio, porque empecé con lápiz, pincel y aerógrafo y cuando me estrené con el shop (versión 1.5) llevaba currando ya como 5 años

Anónimo dijo...

Hola de nuevo, muchas gracias por la bienvenida y las explicaciones.
No es que considere el photoshop antiguo, es que no creo que sea lo más adecuado para modelar en 3D, hay programas más avanzados, es lo que pretendía decir ;).
Gracias por la explicación sobre las orejas y los hocicos, me suelo preguntar para qué nos hemos montado los mamíferos estos líos estructurales, si por ejemplo las aves se las apañan requetebien sin ellas.
Presona las confianzas, pero viendo las horas de respuesta me pregunto si duermes :).

Susana

José Antonio Peñas dijo...

La verdad es que suelo trabajar por las noches (cosas de ser autónomo y tener un niño. son las horas más tranquilas) pero anoche fue una cuestión de mantenimiento. He estado de vacas tras dos meses apretadísimos de trabajo y quería aprovechar para hacer una buena limpieza en el equipo (archivos repetidos, versiones iniciales de los trabajos, documentación) y escribir un ratito.

Evidentemente Photoshop no es un programa de 3D, pero una vez saco los renders (uso LihgtWave, no es muy usual pero es que la interface de 3dMax me da dolor de cabeza) siempre me llevo los archivos a Photoshop para darles algunos toques finales (o muchos, según sea el tema)

Anónimo dijo...

También soy autónoma desde casa, me hago a la idea, pero lo que hago es programar pelotitas que suben y bajan. Y desear vacaciones y desear tener niñera. Menudo verano.
Sobre el 3DMax me lo recomienda mucho un conocido, aunque el muy graciosillo me dice que cuesta hacerse a los comandos. No conozco el LightWave, sin embargo, sí toco a menudo el Gimp. Pero no pretendo decir queni por asomo me pueda comparar a un dibujante de los buenos. Me metí en dibujar animales porque leí un orbituario de Simon Combes, lo busqué y me impresionó :).
Me ha gustado mucho el blog, por aquí seguiré, me encuentro a gusto.

Susana